Hacía bastante que no publicada ningún restaurante de León, y es que me faltan horas en el día para hacer todo lo que me gustaría. Para esta ocasión, y sin nada especial que celebrar, decidimos cenar en el restaurante Valdesogo de León.
El Valdesogo es un bar clásico de toda la vida, pero hace algunos meses ha cambiado de dirección y ha sido muy bien remodelado. En la parte de arriba, a pie de calle, nos encontramos el bar de tapas, Pero en esta ocasión fuimos a cenar. Yo tenía buenas referencias del restaurante, y la verdad, es que todo lo que me contaron es verdad.
Su localización no puede ser mejor, ya que está situado en pleno centro del Barrio Húmedo de León, en la calle Carnicerías 3, justo al lado de la conocida plaza de San Martín.
El Restaurante
El comedor se encuentra a nivel de sótano, y lo primero que llama la atención son sus paredes empedradas. Personalmente me recordaron a la muralla de León. Incluso se me ocurrió la posibilidad de que fueran parte de la misma muralla.

Se puede ver, que las piedras, son iguales que las que podemos encontrar en la muralla romana de León. Quizás algún día descubra la verdad sobre estas paredes. El resto de la decoración del comedor no es nada especial, además se pueden ver cajas y botellas que no hacen ningún bien a la decoración, supongo que no tienen un almacén, o el que tienen es muy pequeño.
El conjunto decorativo me parece austero pero aceptable, tampoco fui a ver una obra de arte, yo fui a cenar.


La cena
Aquí empezó realmente lo bueno. Ya me habían hablado bien del Valdesogo, pero pude comprobar por mi mismo que estamos ante un restaurante que sin duda vale la pena visitar. Todo lo que comimos estaba muy rico, comida casera hecha con mimo y con intensos sabores. No tiene nada que envidiar a otros restaurantes más lujosos de la ciudad.
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Para empezar, el primer detalle que nos gustó, una tapa de aceitunas para aliviar la espera, de vez en cuando nos encontramos con algún restaurante que tiene este tipo de detalles, y nos encanta. No era una tapa grande, de hecho ni siquiera era una tapa, es un detalle, un regalo del restaurante para premiar nuestra espera. Sin duda les agradecemos el detalle.

Después de este rico entrante, vino el primer plato. En este caso pedimos un arroz para compartir. ¿Qué os parece el aspecto?
El arroz estaba delicioso. La verdad es que nos encantó, tenía un sabor estupendo, intenso y con un punto de cocción perfecto. Pocas veces hemos comido un arroz tan delicioso.
Al fondo de la foto se puede apreciar el queso, de color más blanquecino. Este queso le daba al arroz un toque espectacular. Si tuviera que poner un pero, diría que la ración era un poco pequeña, pero la compartimos entre dos. Si la come una sola persona es suficiente para acompañar con un segundo plato. Aunque pensándolo bien, quizás nos supo a poco por lo rico que estaba… quién sabe…

De segundo plato pedimos dos de carne, uno para cada uno.
De nuevo estábamos ante una grata sorpresa. La carne estaba espectacular, con un punto perfecto para mi. Las patatas fritas «no congeladas» son un puntazo. Sin duda estos platos de carne son de lo mejor que hemos comido recientemente. Estoy convencido que repetiremos en algún momento.
El tamaño de la ración es bastante aceptable. Hay que tener en cuenta el grosor de la carne. De entrada puede parecer una ración pequeña, pero la verdad es que quedamos estupendamente bien.


Para esta noche nos dimos un buen capricho y pedimos un vino que nos supo estupendamente bien. Un Marqués de Cáceres crianza, no sobró ni una sola gota.
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El postre
Para terminar pedimos un postre para compartir. En esta ocasión pedimos un trozo de tarta que nos gustó mucho. Fue la manera perfecta de terminar un menú exquisito y totalmente recomendable.
No voy a decir que es la mejor tarta del mundo, pero yo repetiría sin problemas. Yo no soy una persona que coma dulces, pero solo de ver la foto, me entran ganas de volver. ¿Qué os parece?

Conclusión
Para terminar, solo puedo recomendar este estupendo restaurante. No resultó ser especialmente caro, todos los precios estaban en la línea que podemos encontrar en la ciudad. Ni especialmente barato, ni excesivamente caro.
La atención fue estupenda, muy amable y agradable.
También es un sitio recomendado como bar de tapas, tiene bastantes para elegir, y aunque no son muy grandes, son muy sabrosas.