El sábado era día de celebración y escogí un sitio para cenar que teníamos muchas ganas de probar, el Casa Mando. Es un restaurante relativamente nuevo que está situado en la calle General Lafuente, en pleno centro de León. Su decoración es bonita y acogedora, da la sensación de ser un sitio de lujo, y desde luego la comida lo fue.
Los platos
Al poco rato de sentarnos nos trajeron un aperitivo muy rico con un variado de panes muy curioso y bonito:
De primero y para compartir pedimos unas mollejas rebozadas con una salsa. No nos esperábamos que nos las sirvieran así pero nos encantó, una presentación super bonita y un sabor delicioso. Como se puede apreciar en la foto los trocitos de molleja eran para mojar en la salsa. Si tuviera que poner un «pero» diría que la mayoría de los trozos eran demasiado pequeños y no se apreciaba el sabor de la molleja, no era un problema grave ya que la salsa, ligeramente picante, estaba riquísima.
De segundo mi novia pidió el 1/2 solomillo con huevo frito y patatas fritas, puede sonar demasiado sencillo, y quizás lo era, pero el sabor de la carne disipaba dudas y uno se daba cuenta de que esa carne estaba perfectamente hecha y tenía un sabor buenísimo. La ración era quizás algo escasa, poca carne, pero en este caso no restaba importancia al plato.
Yo de segundo pedí rabo de toro, no es una carne que pida a menudo y esta vez me apetecía cambiar. Por supuesto no me defraudó en absoluto, increíble, deliciosa, perfectamente cocinada, un sabor casero con una presentación excelente. Su tamaño engañaba, llenaba más de lo que parecía.
Para finalizar y completar una cena excelente pedimos un sorbete de mango con un licor que no recuerdo, sobra decir que estaba muy bueno. El camarero preparó el sorbete delante de nosotros y quedamos encantados con su sabor, es un postre ligero y delicioso.
Resumen
Resumiendo, un restaurante al que volveremos con toda seguridad, un trato excelente y una comida muy buena. Si tuviera que decir algo negativo diría que nos cobraron el aperitivo (el cual no pedimos pero si comimos), cosa que no me esperaba, lo hemos visto en otros restaurantes y no recuerdo que nos pasara. De todos modos el aperitivo más el pan fueron 1,80, si no recuerdo mal, y el total de la cena 60,80€. Sinceramente tenía en mente pagar bastante más. Otro detalle ligeramente negativo fue la carta de vinos, nos pareció un poco cara, estoy acostumbrado a poder elegir entre más vinos y más baratos.